Foto: Nacho Villarín
Con su victoria del pasado sábado se convierte en el segundo piloto finlandés que más veces ha ganado esta prueba, empatado con Tommi Mäkinen.
Suecia siempre es especial. Un rallye, al igual que el Mil Lagos, reservado, por tradición, -esa misma que no han tenido remilgos en violar Loeb y Ogier-, para los bravos y paliduchos pilotos de la Europadel Norte, iniciados en el arte de la conducción desde críos sobre los lagos helados que abundan por aquellas latitudes.
Uno de los hombres que responde perfectamente a ese perfil es, sin lugar a dudas, Jari-Matti Latvala. El finés logró la primera gran hazaña de su carrera deportiva precisamente aquí, en Suecia, allá por 2008, donde se impuso con 22 añitos a los mandos de un Ford Focus WRC, relevando en los libros de historia a su ídolo, Henri Toivonen, como el piloto más joven capaz de ganar un rallye del Mundial.
Cuatro años después, reeditó aquel triunfo con un Fiesta WRC, en un final apoteósico cara a cara con Mikko Hirvonen. Y este año ha hecho lo propio al volante de su nuevo Polo R WRC, tras batirse esta vez en duelo con su compañero Andreas Mikkelsen.
Una victoria esta -la tercera de Latvala en Karlstad- que le convierte en el piloto de la actualidad que más veces se ha impuesto en el rallye de invierno por antonomasia del Mundial. Y sitúa a Jari-Matti en el ranking como el segundo finlandés más laureado en Suecia, empatado con Sin embargo, Tommi Mäkinen.
Latvala aún tendría que ganar dos años más para igualar el magnífico repóker que reunió durante la pasada década Marcus Grönholm, el piloto de su país que más triunfos ostenta en las pistas nevadas del país escandinavo, a dos del récord absoluto, establecido a mediados de los ochenta, por el que es, junto a Bjorn Waldegaard, el embajador histórico más ilustres de esta prueba: Stig Blomqvist. Nada menos...
Aunque ya no sea un axioma irrevocable, los nórdicos siguen siendo -como exige la tradición- los mandamases del Rallye de Suecia.
Fuente: Nacho Villarín